La intolerancia a la histamina - Perspectivas naturopáticas

Introducción

La histamina es un compuesto orgánico que está involucrado en muchos procesos en el cuerpo. Se puede producir dentro del cuerpo humano o ingerirse a través de los alimentos. En los seres humanos, la histamina se sintetiza en varias células, incluidos los mastocitos, los basófilos, las plaquetas, las neuronas histaminérgicas y las células enterocromafines. Se almacena intracelularmente en vesículas y se libera con la estimulación. Puede unirse a uno de sus cuatro receptores conocidos, que actúan en el intestino, el sistema nervioso central, la piel, las vías respiratorias, el sistema cardiovascular, el útero y la médula ósea.^[1] Aunque a menudo se piensa en la histamina como una pieza clave en las reacciones alérgicas, también juega otros roles importantes en el cuerpo. Es un neurotransmisor que actúa como mediador de la atención y la excitación, y un estimulante de la secreción de ácido gástrico por parte de las células parietales en el estómago.^[2]

Independientemente de si se produce endógenamente o se ingiere a través de los alimentos, la histamina es metabolizada por varias enzimas; sin embargo, en algunas personas, el consumo de alimentos con alto contenido de histamina, así como las alteraciones en las vías metabólicas pueden conducir a la intolerancia a la histamina. La intolerancia a la histamina, también conocida como histaminosis, se define como un desequilibrio entre la histamina acumulada y la capacidad de degradación de la histamina.^[1] Algunos autores estiman que la prevalencia de la intolerancia a la histamina es de 1% en la población general.^[1]

Metabolismo

Las dos principales enzimas que metabolizan la histamina son la diamina oxidasa (DAO, anteriormente conocida como histaminasa) y la histamina N-metiltransferasa (HNMT). Los estudios han demostrado que la DAO es importante para inactivar y eliminar la histamina extracelular, mientras que la HNMT es una enzima citosólica que es responsable de la inactivación de la histamina intracelular^[3][4] Ambas enzimas se expresan en una serie de tejidos, mientras la DAO se expresa predominantemente en el intestino,^[5] la HNMT se expresa de forma casi ubicua.^[4] La DAO juega un papel fundamental en el metabolismo de la histamina ingerida,^[6] probablemente debido a su presencia en el intestino.

La histamina en los alimentos

Como se mencionó, la histamina y varias otras aminas biogénicas se encuentran de forma natural en muchos alimentos. También se pueden ser producir en los alimentos por bacterias como parte del proceso de producción, o durante el almacenamiento o la descomposición.^[7] Los alimentos que contienen cantidades considerables de histamina son generalmente los alimentos fermentados, como ciertos quesos, carnes, cerveza y vino.^[8][9] Sin embargo, algunas verduras también contienen histamina de forma natural, así como una cantidad de tipos de pescados.^[9] Se ha sugerido que algunos alimentos, como los cítricos, aumentan la liberación de histamina del cuerpo, a pesar de que esos alimentos contienen muy poca histamina.^[1]

La intolerancia a la histamina

Los síntomas de la intolerancia a la histamina son muy variados, lo que no sorprende, ya que la histamina actúa en muchas partes del cuerpo. Los principales síntomas son diarrea, estornudos, rinorrea y congestión de la nariz, dolor de cabeza, prurito, enrojecimiento del rostro, asma, hipotensión,^[10] urticaria,^[11] y arritmias.^[12]

Muchos de los síntomas de la intolerancia a la histamina se parecen a los de una respuesta alérgica mediada por IgE; por lo tanto, a menudo se realizan pruebas de punción cutánea, pero no se encuentran desencadenantes. ^[9] El mecanismo de la alergia mediada por IgE es diferente porque en esta alergia, la reacción se debe a la reticulación de anticuerpos y solo se necesita una pequeña cantidad del alérgeno, mientras que la intolerancia a la histamina se basa en un desequilibrio entre la acumulación y la degradación de la histamina. La cantidad acumulada de histamina en el cuerpo es un factor clave en la intolerancia a la histamina. ^[1]

Mecanismo

Ingerir grandes cantidades de alimentos con alto contenido de histamina es una forma de precipitar los síntomas de intolerancia a la histamina, aunque los investigadores han señalado que puede ser difícil culpar indudablemente a la histamina, ya que los alimentos que contienen histamina a menudo contienen otras aminas biogénicas o aditivos. ^[13] Sin embargo, se ha demostrado que consumir una dieta baja en histamina ayuda a reducir los síntomas.^[9]

La degradación insuficiente de la histamina en el cuerpo, debido a la alteración de la actividad o la inhibición de las enzimas, es el otro factor causante de la intolerancia a la histamina. El alcohol, además del posible contenido de histamina en ciertos tipos, también puede afectar la acumulación de histamina al alterar el metabolismo. Se descubrió que el alcohol inhibe la DAO,^[14] lo que produciría una disminución del metabolismo de la histamina. También se ha descubierto que ciertos medicamentos alteran el metabolismo de la histamina, incluidos varios que se utilizan en cuidados intensivos, como los antibióticos de cefalosporina.^[15][16]

Se ha encontrado una baja producción de DAO en el intestino debido al daño intestinal.^[17] En un estudio realizado por Raithel et al, se encontró que las personas con alergia alimentaria (ya descartadas otras enfermedades gastrointestinales por colonoscopia) tenían una disminución de la actividad de la DAO en ciertas partes de los intestinos. ^[17] En individuos que padecen enfermedades inflamatorias del intestino, muestras de tejido de la mucosa enferma revelaron una actividad de la DAO significativamente menor en comparación con el tejido sano.^[18][19] Los niveles plasmáticos de la DAO se han correlacionado positivamente con la madurez y la integridad de la mucosa intestinal,^[20] lo que sugiere que un intestino dañado podría precipitar la intolerancia a la histamina.

Otra causa de un funcionamiento subóptimo de la DAO y la HNMT podría ser la genética. Los estudios han demostrado que los polimorfismos genéticos de la DAO y la HNMT juegan un papel en la expresión y la actividad de las enzimas.^[21][22] Se han encontrado estos polimorfismos en personas que sufren de una variedad de enfermedades intestinales inflamatorias, sugiriendo además la existencia de un vínculo entre el daño intestinal y la producción subóptima de DAO. ^[23]

Diagnóstico

El diagnóstico de intolerancia a la histamina sigue siendo difícil. Schwelberger et al sugirieron que el diagnóstico debería comenzar con un seguimiento cuidadoso de los síntomas después del consumo de alimentos, la identificación de los alimentos causantes y la determinación de su contenido de histamina.^[30] También sugirieron que para alcanzar un diagnóstico definitivo se necesita una provocación oral de histamina, doble-ciego, controlada con placebo, determinando las concentraciones plasmáticas de histamina y los parámetros físicos objetivo, tales como la frecuencia cardiaca, la presión arterial y el eritema.^[6] Un estudio reciente de Music et al analizó los niveles séricos de la DAO de 316 individuos con signos clínicos de intolerancia a la histamina.^[24] Encontraron que la actividad de la DAO en estos pacientes era mucho menor que en los controles sanos, y los pacientes con actividad muy reducida de la DAO presentaban síntomas severos típicos de la intolerancia a la histamina después del consumo de alimentos ricos en histamina. Los síntomas principales involucraron la piel, el tracto gastrointestinal, el sistema respiratorio y los ojos. Los resultados de este estudio sugieren que la determinación de la actividad de la DAO en suero es una herramienta útil para diagnosticar la intolerancia a la histamina.^[24] Komericki et al no lograron reproducir síntomas únicos después de una prueba con ingestión oral de histamina en pacientes sensibles a la histamina previamente seleccionados.^[13] El hecho de que los síntomas de la intolerancia a la histamina son muy variados, junto con la evidencia del estudio mencionado anteriormente, sugiere que los síntomas individuales por sí solos no son apropiados para diagnosticar la intolerancia a la histamina, sino que una puntuación global de los síntomas sería más apropiada.^[13]

Investigaciones recientes

Si bien los ensayos controlados aleatorios son limitados, algunos estudios más recientes han investigado la relación entre la intolerancia a la histamina y los problemas dermatológicos. Worm et al evaluaron el papel que la histamina desempeñaba en la severidad de la dermatitis atópica.^[25] Concluyeron que altas cantidades de histamina ingerida pueden agravar el eczema en aproximadamente 30% de los pacientes con dermatitis atópica. Maintz et al informaron que los síntomas de intolerancia a la histamina eran significativamente más comunes en pacientes con eczema atópico que en los controles. ^[27] Descubrieron que una dieta sin histamina podía reducir los síntomas de intolerancia a la histamina y la gravedad del eczema atópico en esta población.^[27] De manera similar, Chung et al han demostrado que una dieta baja en histamina puede ser beneficiosa en el tratamiento de la dermatitis atópica.^[26]

Tratamiento

Las opciones de tratamiento para una presunta intolerancia a la histamina podrían incluir una dieta libre de histamina o baja en histamina como se mencionó anteriormente ^[9][26][27] Jarisch et al sugieren eliminarla por un mínimo de cuatro semanas, junto con la toma de un medicamento antihistamínico H1 por 14 días.^[28] Existe cierta preocupación, ya que se descubrió que algunos medicamentos antihistamínicos inhiben aún más la actividad de la DAO, específicamente la cimetidina, un antagonista del receptor H2 de histamina.^[29] Evitar las sustancias que inhiben la DAO o la HNMT debería ser parte del tratamiento.^[30] Los estudios han demostrado que tomar un suplemento oral de DAO (extraído de los riñones de cerdo), en comparación con el placebo, produjo una reducción estadísticamente significativa de las puntuaciones totales de los síntomas.^[13] Apoyar la actividad de la DAO tomando un suplemento con fosfato de piridoxal (vitamina B6 ) también puede ser útil. ^[28][31]

Conclusión

Si bien la idea de que la histamina ingerida desempeña un papel en el desarrollo de una serie de síntomas se ha explorado desde la década de 1980, la investigación sólida ha sido escasa. En pacientes con una variedad de síntomas aparentemente no relacionados, desencadenados por alimentos que son típicamente altos en histamina (sobre todo los alimentos fermentados), se debe sospechar una intolerancia a la histamina. Otros factores, como el consumo de alcohol, el consumo de drogas y el posible daño intestinal podrían estar afectando los niveles de la DAO, por lo tanto, también se deben considerar. Sería útil investigar más sobre la fisiopatología y las opciones de tratamiento, específicamente las relacionadas con la producción y la mejora del funcionamiento de la enzima DAO.