Toxinas Ambientales

Como médicos naturistas, nos fijamos en todos los aspectos de la salud de un individuo. Consideramos su estado de salud actual y vemos cómo puede mejorar su salud. También investigamos factores de riesgo que puedan afectar su nivel actual de salud. Conocemos algunos de estos factores de riesgo: una dieta rica en alimentos procesados, la falta de ejercicio, el estrés, el tabaquismo, el consumo de alcohol, sólo para nombrar algunos. Hay elementos ocultos en nuestro entorno que pueden afectar negativamente a nuestra salud. Productos en nuestros alimentos, en los productos de cuidado personal y incluso productos de limpieza del hogar de uso diario, todos tienen sustancias químicas que aumentan la carga tóxica en nuestro cuerpo.

La siguiente es una lista de los elementos que están más altamente contaminados con pesticidas y es mejor si se compra su forma orgánica, mientras que otros productos están relativamente menos contaminados y se puede comprar en su estándar convencional.

Los productos más contaminados:

• Manzanas
• Peras
• Duraznos
• Nectarinas
• Bayas
• Uvas
• Pimentones
• Apio
• Judias Verdes
• Papas
• Verduras de hoja verde(por ejemplo: Espinaca, lechuga)
• Pepino
• Calabaza

Además, los productos de origen animal pueden ser una fuente de contaminantes relativamente elevados. Cómo se crio el animal y lo que este come influirá en el valor nutricional y la carga tóxica de los productos. En cuanto el consumo de carne, es importante asegurarse de que los animales fueron criados sin el uso de antibióticos u hormonas de crecimiento. Al comprar carne de res, además de haber sido criado sin el uso de antibióticos y hormonas de crecimiento, se debe garantizar que el ganado fue alimentado con pasto. Hay varios productos cárnicos orgánicos alimentados con pasto en el mercado en los supermercados locales.

Los aditivos también son importantes para tener en cuenta, ya que añaden a la carga tóxica general de una persona. Muchas personas sufren de reacciones ante ellos, y pueden incluso no ser conscientes de que estas sustancias están al acecho en su dieta diaria. Varios productos contienen colorantes, que se enumeran en la lista de ingredientes como el nombre mismo del color y un número. Sin embargo, no todos los aditivos se enumeran tan abiertamente. Algunas listas de ingredientes pueden decir "sabores naturales", esto puede indicar el uso de MSG, o cualquier otro producto químico sintético que se ha agregado en el procesamiento del producto. Sin embargo, cuando se consumen alimentos integrales, o alimentos que no provienen de una caja, nosotros no tenemos que preocuparnos por este tipo de aditivos o procesamiento.

Como preparamos nuestros propios alimentos en nuestro hogar también puede influir en la carga tóxica de nuestros cuerpos. Por ejemplo, la práctica común de la barbacoa de verano posiblemente puede conducir a un aumento de la carga tóxica si el alimento está carbonizado. Por lo tanto, lo mejor es que si estamos carbonizando nuestros alimentos, la parte carbonizada se debe retirar antes de comer.

La comida debe ser disfrutada, y obtenemos muchos nutrientes necesarios para optimizar nuestra salud, además de tener una deliciosa comida. Algunas fuentes para ayudarle a alcanzar esa meta incluyen:

• Front Door Organics (compañía de entrega para productos orgánicos y otros productos)
• Mama Earth Organics (compañía de entrega para los productos orgánicos y otros productos)
• 80twenty.ca (blog de comida)

La piel es el órgano más grande y más poroso del cuerpo humano; por lo tanto, lo que se pone en la piel se absorbe directamente hacia el torrente sanguíneo. Los productos cosméticos contienen más de 900 productos químicos y la FDA no requiere que las empresas listen todos los ingredientes en su etiqueta y no requieren de aprobación previa por la FDA para su comercialización, con la excepción de los aditivos de color.

Los productos químicos más comunes y preocupantes a tener en cuenta y evitar son los que se indican a continuación:

• parabenos: se encuentra en desodorantes, imita el estrógeno
• laurilsulfato de sodio: un detergente presente en las pastas de dientes, jabones líquidos, bases faciales, casi todos los champús y en los jabones líquidos de manos. En su fabricación, este producto químico es a menudo contaminado con 1,4-dioxano, un conocido carcinógeno
• ftalatos: un ingrediente plastificante, que se ha relacionado con defectos congénitos.
• fragancias: los almizcles están vinculados con la irritación de la piel, los trastornos hormonales y el cáncer; por su parte, fragancias artificiales es un inductor de asma alérgeno superior conocido.
• metilisotiazolinona (MIT): un producto químico encontrado en los champús que impide la colonización bacteriana, lo que puede afectar al sistema nervioso.
• tolueno: derivado del alquitrán de hulla o el petróleo, se encuentra en la mayoría de las fragancias artificiales y los esmaltes de uñas. La exposición crónica a este producto químico puede provocar anemia, disminución del recuento de glóbulos sanguíneos, daño al hígado o al riñón, y es teratogénico (puede hacerle daño al feto en desarrollo).
• aceite mineral, parafina y vaselina: estos productos químicos cubren la piel y taponan sus poros, se sospecha que sean carcinógenos y disruptores de hormonas.

Un buen recurso para tener a mano es la pagina de web Environmental Working Group y la aplicación para teléfonos inteligentes Skin Deep- una base de datos cosmético que clasificara los ingredientes químicos peligrosos dentro de cada producto, lo cual también incluye una función de escaneo de código de barras. Ya que la piel es altamente absorbente, la mejor recomendación es que si no puedes comerlo, entonces usted no debe usarlo en su piel.

Muchos limpiadores de baño tienen diferentes ingredientes químicos que no sólo causan preocupaciones para la salud, pero también causan preocupaciones ambientales. Estos productos químicos, tales como compuestos de amoniaco y silicio, ambos pueden causar problemas de salud agudos y crónicos. Condiciones agudas incluyen alergias de la piel e irritación por contacto, así como ataques de asma y otros síntomas respiratorios con su inhalación. Problemas de desarrollo, condiciones reproductivas y cáncer pueden ocurrir con la exposición a largo plazo a estos productos químicos. El uso de guantes para limpiar el baño puede no ser de suficiente protección; incluso después de usar los productos de limpieza, puede haber residuos químicos persistentes en el aire que se respira. Esto es especialmente dañino para los niños ya que son más vulnerables a las toxinas debido a su mayor relación entre el área de superficie pulmonar y su peso corporal.

Para protegerse y proteger a su familia, hay alternativas fáciles para los limpiadores de baño tradicionales. Para el inodoro, mezcle media taza de vinagre con 1 cucharada de bicarbonato de sodio y, a continuación, déjelo que repose una media hora antes de restregar. Para limpiar el lavabo, la bañera y el piso de cerámica, combine ½ taza de jabón líquido a base de aceite de vegetales, ⅔ bicarbonato de sodio, ½ taza de agua y 2 cucharadas de vinagre en una botella de spray.^[2]

Muchos de los productos de limpieza que utilizamos para lavar las superficies comunes en nuestra cocina pueden tener un impacto significativo en nuestra salud y bienestar. En Canadá, no se requiere que los fabricantes de productos de limpieza domésticos muestren sus ingredientes en sus etiquetas. Pero los productos de limpieza comunes pueden contener tales ingredientes nocivos como la lejía, el amoníaco, los fosfatos o abrasivos fuertes.

El amoníaco (NH3) es uno de los productos químicos industriales más comúnmente producido, y se encuentra en una variedad de limpiadores para el hogar. Las soluciones de limpieza que contienen amoníaco se fabrican mediante la adición de gas de amoniaco al agua en un concentrado de 5-10% de amoníaco. Los efectos inmediatos en la salud de la exposición a amoniaco tras la inhalación pueden incluir: tos e irritación de la nariz y garganta. El contacto con la piel y los ojos puede causar irritación rápida y severa. Mayores concentraciones de amoníaco pueden causar lesiones graves y quemaduras. Además, el hipoclorito de sodio (el ingrediente principal en la lejía a base de cloro) puede crear un gas de cloro venenoso si se mezcla con el amoniaco (que puede ser un ingrediente no marcado en algunos productos de limpieza) o con el vinagre. ^[5]

Evite estos peligros en el hogar siguiendo medidas de limpieza seguras y haciendo sus propios productos de limpieza de fabricación casera. Las opciones caseras de limpieza reducen su exposición a la exposición química no deseada, pero aun así puede proporcionar los mismos resultados que los agentes comerciales preparados. Trate de usar este lavado de pisos natural; mezcle ¼ (60 ml) de vinagre blanco en 8 litros de agua tibia y añade de 10 a 15 gotas de limón o aceite esencial de pino y limpie sus pisos como de costumbre.^[6]

El detergente de lavandería comercial tiene muchos materiales irritantes e ingredientes tóxicos como el 1,4-dioxano que se sabe que es un agente cancerígeno. En algunos estudios con animales, se ha demostrado que causa cáncer de mama. Además de otros productos químicos que pueden causar complicaciones en el embarazo, defectos de nacimiento (tolueno y ftalatos - interrupción hormonal), el asma y las reacciones alérgicas (limoneno, linalol, eugenol y la cumarina - alergenos).

Una alternativa fácil a cualquier detergente de lavandería de marca que es libre de bórax es la mezcla de un bar de jabón sin perfume de glicerina o de verduras finamente rallado con 1 taza de soda de lavado, ½ taza de bicarbonato de sodio, ½ taza de ácido cítrico y ¼ de taza de sal gruesa.

Las toxinas ambientales están en nuestro alrededor y se encuentran comúnmente en una serie de productos para el hogar. Si somos diligentes y consideramos el uso de alternativas al menos a veces, se disminuye en general nuestra carga y exposición a toxinas, que pueden a su vez darle a nuestros cuerpos una mejor oportunidad de procesarlos correctamente y eliminarlos.