La glicina - Mejora de la Calidad del Sueño

Introducción

¡Dormir puede ser un negocio complicado! Aquellas personas que no tienen dificultad para lograr un sueño saludable y regular pensarían que es el más simple de los fenómenos fisiológicos. Sin embargo, aproximadamente el 30% de la población sufre de insomnio (1), que tiene consecuencias reales e importantes para la salud, además de afectar la calidad de vida. Incluso la interrupción del sueño a corto plazo se asocia con problemas metabólicos, resistencia a la insulina, mal control de glucosa en sangre, aumento del índice de masa corporal (IMC), aumento de los niveles de dolor e inflamación, e incluso aumento de la mortalidad (2). Y la interrupción patógena del sueño puede ser una señal de, o contribuir a trastornos tanto psiquiátricos (3) como neurodegenerativos .^[4]

Si usted está entre los miles de personas que tienen dificultades para dormir, es posible tener en cuenta que la ciencia moderna todavía tiene un alcance relativamente débil en las complicadas relaciones entre la dieta, la hidratación, la salud emocional / espiritual, contribuyentes ambientales y la química del cerebro relacionados con el sueño. En la actualidad, ésta es un área que está recibiendo una considerable atención en el ámbito científico, y los resultados están teniendo implicaciones de largo alcance. El papel de la glicina en la regulación del sueño es un excelente ejemplo.

La glicina es un aminoácido pequeño, no esencial. Es relativamente ubicuo en nuestro tejido muscular y piel y desempeña un papel importante en la regulación y soporte de muchas vías importantes. Previamente considerado como biológicamente inerte, hallazgos inesperados en un estudio en que se utilizó glicina como placebo para investigar la función de otros aminoácidos en el cerebro dio lugar a un estudio sobre los efectos de la glicina en la calidad y los patrones del sueño humano .^[5]

La glicina se somete a la difusión pasiva a través de la barrera hematoencefálica y actúa principalmente sobre los receptores de N-metil-D-aspartato (NDMA) (5). Sus acciones sobre el receptor NDMA se creen responsables de la inhibición de la actividad muscular durante los movimientos oculares rápidos (MOR) del sueño de (6), y para la reducción de la temperatura corporal central para facilitar el sueño (7,8,9). La administración de glicina oral también aumenta los niveles de serotonina, sin aumentar los niveles de dopamina (5) para ayudar a normalizar los ritmos circadianos.

Además de ayudar a normalizar objetivamente la fisiología del sueño (9), la suplementación oral con glicina mejora los síntomas subjetivos de la privación del sueño (11). En las pruebas, los sujetos mostraron una mejor satisfacción por el sueño y la una disminución de la somnolencia diurna y el deterioro cognitivo .^{[2, 9]}

Una pizca de polvo de glicina debajo de la lengua puede dar alivio inmediato al “hilo de pensamientos" o sobrecarga de pensamientos, lo cual es una queja común entre los pacientes con insomnio que contribuir a dificultar la aparición del sueño (11). De hecho, el polvo de glicina oral a la hora de acostarse aminora los síntomas subjetivos de la privación del sueño, la fatiga de la mañana, la fatiga visual y los sentimientos de inquietud y dificultad para concentrarse, mejorando así el reconocimiento de memoria .^{[10, 11]}

Este aminoácido naturalmente dulce es seguro para su uso continuado como un suplemento oral. En dosis moderadas, la administración de suplementos de glicina puede ayudar a normalizar la arquitectura del sueño para reponer los innumerables beneficios de un sueño reparador, restaurador.

Al principio, se pensó que la glicina – el más simple y pequeño de los aminoácidos- era inerte en sus efectos sobre la fisiología (6). Pero un estudio en los últimos años ha mostrado que esta pequeña molécula ¡puede ser una potencia! Ya hemos discutido el impacto de la glicina como normalizador del sueño al actuar sobre los receptores NMDA (14,15,16,17). A través del mismo mecanismo, la administración de suplementos de glicina oral también ayuda a normalizar la química cerebral de la adicción, y prevenir las recaídas.

La glicina está críticamente involucrada en la regulación del consumo de etanol (alcohol) (15). La elevación de las concentraciones de glicina en la unión de señalización entre las neuronas ha demostrado reducir la ingesta de alcohol (15) e inhibir el deseo de consumir drogas como la cocaína y las anfetaminas (16,17). El mecanismo de estos efectos aún es poco conocido, pero la evidencia sugiere que el aumento de los niveles de glicina también atenúan los efectos de las anfetaminas en el cerebro .^[14]

Hasta la fecha, la medicina se ha centrado en el bloqueo de los efectos de la droga con el fin de tratar y manejar la fisiología de las adicciones. El hecho de que la glicina ayude tanto a atenuar los efectos de las drogas como el alcohol, la cocaína y las anfetaminas; como disminuir el impulso de consumir estas sustancias es muy emocionante. Es tan impactante, de hecho, que actualmente se están probando una serie de fármacos para modular la absorción de glicina, con el fin de aumentar efectivamente la cantidad de glicina en el cerebro en aplicaciones terapéuticas (18). Los ensayos en humanos aún no han informado los resultados para la mayoría de estos medicamentos, pero sí sabemos que simplemente complementando con glicina oral, ¡se obtendrán efectos similares !^[3]

Podemos utilizar la glicina oral para disminuir la necesidad de consumir drogas y alcohol (tanto en adictos y como en consumidores moderados) (19), y para ayudar a bloquear los efectos cuando se consumen las drogas. ¡Pero la glicina no se detiene ahí! Un suplemento de glicina oral puede mejorar el efecto de la terapia comportamental para superar las adicciones y prevenir las recaídas (entrenamiento en extinción) (16,20,21). No está claro si estas mejoras están relacionadas con la mejora de la recuperación de la memoria, de tal manera que los adictos en recuperación son capaces de recordar y emplear sus técnicas cognitivo-conductuales (22). Lo que sí sabemos, sin embargo, es que los cambios en los niveles de glicina en el cerebro se corresponden con la mejora de la atención, la memoria, la impulsividad, la memoria emocional y la memoria de aprendizaje intelectual (23). Estos rasgos son impactados negativamente con la adicción, por lo que un protocolo de tratamiento con los posibles "efectos secundarios" que ayude a normalizar los cambios relacionados con el comportamiento abre un mundo de posibilidades.

Los usos terapéuticos de glicina para tratar las adicciones, sin embargo, va aún un paso más allá. Hay pruebas de que la glicina suplementaria ayuda a reducir la toxicidad del consumo crónico de alcohol en el hígado y acelera la recuperación de la lesión hepática inducida por el alcohol .^[22]

Los riesgos de la administración de suplementos de glicina oral, incluso a niveles terapéuticos, son insignificantes. Y así, por un gran número de razones y aplicaciones, este pequeño aminoácido produce un gran impacto en los protocolos de recuperación de las adicciones.

El creciente cuerpo de evidencia sobre el impacto de los niveles de glicina en el cerebro no termina con las implicaciones sobre el sueño y las adicciones, aunque estos efectos solo son interesantes por su importancia terapéuticas y por la posible mejora de la calidad de vida. Una buena cantidad de estudios también están analizando los efectos de la suplementación oral de glicina como parte del manejo farmacológico de la esquizofrenia en beneficio de los resultados del paciente (25). Desde finales de 1980, ha habido un entendimiento de que la terapia con glicina es útil para el tratamiento de los síntomas negativos de la esquizofrenia, como la depresión y la pérdida de la fluidez o flexibilidad mental (26). Los recientes ensayos doble ciego, controlados con placebo respaldan firmemente las conclusiones de que la adición de glicina oral a los protocolos farmacológicos mejora notablemente los síntomas negativos, problemas cognitivos e incluso puede mejorar los síntomas psicóticos en algunos casos.^{[25, 26, 27, 28]}

Dado que los síntomas negativos de la esquizofrenia suelen tener un mayor impacto sobre la noción de la realidad e impacta más sobre la enfermedad que los síntomas positivos, tales como la psicosis, el descubrimiento de que la administración de suplementos de glicina puede mejorar estos síntomas devastadores es un hecho muy significativo. Aún más, estos beneficios sobre el aprendizaje y la recuperación de la memoria parecen extenderse más allá de las aplicaciones en la recuperación de la salud mental y las adicciones, incluyendo así a voluntarios sanos,^[3]

Dado que las empresas farmacéuticas desarrollan medicamentos para imitar los efectos de la glicina oral suplementada, existe un renovado interés en el papel de la glicina en la patología esquizofrénica. El pensamiento actual es que el deterioro del sistema receptor de NDMA (estimulado por la glicina) en realidad puede ser la causa de la esquizofrenia y la patogenicidad .^{[29, 30]}

Esta nueva comprensión de los efectos de la glicina en el cerebro se deriva en otros trastornos psiquiátricos, cognitivos y del estado de ánimo, que van desde la psicosis y la depresión hasta las enfermedades neurodegenerativas como la enfermedad de Huntinton y la enfermedad de Alzheimer (32). Esta línea de estudio científico ha llevado a una mayor comprensión de cómo la glicina oral puede incluso ser de beneficio en el tratamiento y manejo de la lesión cerebral y el accidente cerebrovascular .^{[30, 31, 32]}

El estudio de la regulación de los receptores de NDMA y el equilibrio de aminoácidos ha dado lugar a posibles implicaciones con respecto al TDAH y al autismo (34), y una mayor comprensión de la neuroquímica del trastorno de estrés postraumático y el Parkinson (35). Las implicaciones son de largo alcance y profundas. Aunque algunos de los estudios en estas áreas se centran en la administración de suplementos de glicina directamente, muchos se dirigen hacia objetivos farmacológicos con el fin de inhibir los receptores de NDMA. La suplementación oral con glicina puede lograr efectivamente la misma tarea (5). Sin embargo, mientras que el perfil de seguridad de los productos farmacéuticos apenas ha comenzado a ser establecido, la administración oral de suplementos de glicina tiene un perfil de seguridad bien establecido en dosis terapéuticas.

A medida que la ciencia médica continúa explorando los beneficios terapéuticos de la administración de suplementos de glicina, veremos una lista creciente de efectos ventajosos para la adición de este aminoácido de bajo costo para muchos protocolos terapéuticos.

Además de las aplicaciones psiquiátricas y neuroquímicas de la administración de suplementos de glicina, estudios recientes nos llevan a considerar este potencial aminoácido para aplicaciones somáticas. Ya hemos mencionado el beneficio hepatoprotector de la suplementación con glicina en el contexto del abuso crónico y agudo de alcohol (36). También hemos abordado los beneficios para la lesión traumática cerebral y el accidente cerebrovascular (37,38). Estos demuestran beneficios adicionales, no-psiquiátricos de la glicina en otros tejidos del cuerpo.

La isquemia (pérdida de suministro de sangre) es una causa importante de muerte en trauma, cirugía y el reemplazo de órganos. La glicina reduce significativamente el daño y la pérdida de tejido en estos casos, aunque el mecanismo no se entiende completamente. Lo que está claro es que la glicina tiene efectos directos protectores de las células (39). Protege contra el daño de la respuesta inflamatoria, que se activa a medida que el flujo sanguíneo retorna a las áreas isquémicas (lesión por isquemia y reperfusión) (39,40). Estos efectos protectores de las células y anti-inflamatorios no se limitan al trauma tisular debido a la isquemia. De hecho, los beneficios anti-inflamatorios de la glicina se han aplicado a la prevención y el tratamiento de otras condiciones inflamatorias.

La inflamación es el mecanismo principal en la artritis. Los estudios en animales indican que la suplementación oral con glicina puede mitigar este proceso inflamatorio (5). Y un estudio mecanicista sugiere que estos efectos tienen múltiples y potenciales aplicaciones terapéuticas en los seres humanos (41,42). Condiciones tales como la colitis ulcerosa (43), dolor inflamatorio (44), pérdida de masa muscular en el cáncer (45), e incluso los contribuyentes inflamatorios para la obesidad (46,47,48) muestran una mejora con suplementos de glicina.

Con el cuerpo creciente de datos que apoyan el uso terapéutico de glicina suplementaria, es importante tener en cuenta que la dosificación apropiada no está claramente establecida para la mayoría de aplicaciones. La tabla 1 refleja la dosificación establecida:

La seguridad de los suplementos de glicina se ha establecido claramente. Los cirujanos utilizan rutinariamente una solución de irrigación de glicina durante los procedimientos, aportando dosis de glicina relativamente altas sin efectos adversos. En ensayos clínicos se ha investigado muy a fondo la administración oral de suplementos de glicina en humanos, indicando que dosis orales de 31 g / día (48) y 50 g / día (5) no generan eventos adversos en el largo plazo. Los estudios a corto plazo con 200 mg / kg al día de glicina IV tampoco produjo ningún efecto adverso (5). Aunque se requieren más estudios para dilucidar plenamente la amplitud y el potencial terapéutico de la glicina, el cuerpo montado de evidencia es ciertamente emocionante.