Productos botánicos para el tratamiento del dolor - Perspectivas naturopáticos

En vista de su legalización en Canadá, el cannabis ha recibido mucha más atención últimamente, especialmente cuando se trata de su uso medicinal y su capacidad para ayudar a controlar el dolor. Si bien el cannabis parece ser prometedor en el área del tratamiento del dolor, lo que es aún más notable es que todo este revuelo puede ayudar a que la gente conozca más sobre el poder de las plantas en general y el importante papel que pueden desempeñar en la curación. Muchas plantas se han utilizado durante siglos para asuntos como el manejo del dolor y ahora incluso cuentan con investigaciones que las respaldan.

Sin embargo, antes de pasar a analizarlas, hagamos primero una nota sobre el dolor y su causa raíz.

El dolor es un síntoma de un problema subyacente. En otras palabras, el dolor es la forma en que el cuerpo dice que algo no está del todo bien. La mejor manera de abordar el dolor, entonces, es tratar lo que sea que lo esté causando. Sin embargo, la causa del dolor no siempre puede ser directa. Aquí es donde podría ser útil usar productos botánicos u otras técnicas para ayudar a controlar el dolor mientras trabajas con un profesional de la salud como un médico naturopático para encontrar la causa principal de tu dolor. Mientras tanto, analicemos cinco ingredientes botánicos de eficacia probada que pueden ayudarte a manejar el dolor.

La cúrcuma, o Curcuma longa, es una planta de la familia del jengibre. Es una especia de color amarillo brillante que forma parte importante de la cocina del sur de Asia y a menudo se combina con otras especias como la pimienta negra y el jengibre. Además de aportar color y sabor a los platos del sur de Asia, la cúrcuma también parece tener fuertes propiedades antioxidantes y antiinflamatorias. Dado que la inflamación es una causa tan común de dolor, las hierbas antiinflamatorias o los productos botánicos como la cúrcuma son excelentes herramientas para controlar el dolor.

La parte de la cúrcuma que parece ser más útil en el manejo del dolor es la raíz. La raíz de cúrcuma contiene curcumina, el componente activo que le da a la cúrcuma su color amarillo y al que se ha atribuido sus propiedades antiinflamatorias. La cúrcuma y la curcumina se han estudiado por su capacidad para combatir la inflamación y se ha demostrado que son efectivas para reducir el dolor y mejorar la movilidad en afecciones como la osteoartritis y la artritis reumatoide. [1][2] Incluso se ha demostrado que la cúrcuma es una alternativa útil a los tratamientos convencionales para el tratamiento del dolor como el ibuprofeno y los medicamentos antiinflamatorios no esteroideos (AINE).[3][4] Lo que es aún más interesante es que la curcumina se absorbe mejor cuando se combina con pimienta negra. La pimienta negra parece mejorar la absorción de la cúrcuma, lo que produce un efecto antiinflamatorio más fuerte. Parecería que la tradición del sur de Asia tuvo razón todo el tiempo y que estas dos especias se complementan bastante bien, no solo en sabor sino también en el control del dolor y la inflamación.

La consuelda, o Symphytum officinale, es una hierba resistente con hojas verdes ásperas y flores pequeñas, de color amarillo pálido o morado, que crece en abundancia. También se conoce como “hierba de las cortaduras”, probablemente debido a su uso tradicional en la curación de lesiones como fracturas de huesos, esguinces o incluso lesiones musculares.

Cuando se usa por vía tópica (en cremas o ungüentos, por ejemplo), se ha demostrado que la consuelda no solo ayuda con el dolor cuando es causado por un traumatismo o lesión inmediata, sino que también que es efectiva para ayudar con dolencias más crónicas como el dolor de espalda o dolor en las articulaciones asociado con la osteoartritis. De hecho, un estudio de 2010 encontró que la aplicación de una pomada que contiene raíz de consuelda ayudó significativamente a disminuir el dolor de espalda superior e inferior.[5] Las partes de la planta de consuelda que parecen ser más efectivas para ayudar a controlar el dolor son las hojas o los extractos de las hojas. Si bien la consuelda se ha usado tradicionalmente por vía oral, parece que hay cierta toxicidad asociada con la ingestión de la planta, por lo que es mejor usarla solo en la superficie de la piel.

Es posible que no lo pienses demasiado cuando agregas aceite de oliva para hacer que tu ensalada sea un poco más sabrosa, pero es bastante antiinflamatorio. Gran parte de la investigación sobre los beneficios para la salud del aceite de oliva se centra en las enfermedades cardíacas y la salud cardiovascular. Y si bien es cierto que el aceite de oliva parece destacarse por ayudar a la salud del corazón, en parte debido a sus propiedades antiinflamatorias, estas mismas propiedades lo hacen útil para controlar el dolor. Como discutimos anteriormente, la inflamación y el dolor parecen ir de la mano, por lo que tiene sentido que un antiinflamatorio como el aceite de oliva sea útil para controlar el dolor.

Uno de los principales componentes del aceite de oliva que puede estar involucrado en sus efectos analgésicos es el oleocantal. De hecho, este componente ha sido investigado por sus similitudes con los efectos analgésicos del ibuprofeno.[6] Con sus beneficios para la salud del corazón y sus efectos antiinflamatorios para aliviar el dolor, el aceite de oliva es una excelente manera de controlar el dolor.

Sí, estamos hablando de usar ají picante para el dolor aquí. La cayena, o Capsicum annum, el mismo pimiento picante que a menudo se usa para agregar sabor a varios platos de comida, también tiene un papel en el control del dolor. El componente principal de la cayena que parece ayudar con el control del dolor es la capsaicina, y ha mostrado resultados prometedores en el tratamiento de todo tipo de diferentes tipos de dolor, como dolor en las articulaciones, dolor en los nervios y otros.[7] Incluso se ha utilizado en el tratamiento del dolor asociado con las migrañas.

La mejor explicación de su funcionamiento parece ser que actúa como un contrairritante. ¿Qué significa eso? Básicamente significa que la aplicación de cayena o capsaicina en la piel provoca temporalmente una leve irritación de la piel, que distrae del dolor subyacente más profundo. El sistema nervioso está esencialmente demasiado ocupado procesando la irritación de la sensación de calor recién introducida para procesar el viejo dolor crónico persistente. Otras hierbas / componentes que funcionan de la misma manera incluyen la menta (pero enfría en lugar de calentar) y el alcanfor. Sin embargo, como te habrás dado cuenta, esta suele ser una solución temporal. Si no se abordar la razón por la cual el dolor está allí en primer lugar, una vez que la capsaicina desaparece, el viejo dolor persistente puede resurgir. Sin embargo, si lo que se necesita para abordar el dolor es un tiempo de descanso tranquilo y sin dolor para que el cuerpo pueda sanar, entonces la cayena es definitivamente una gran candidata para proporcionar ese alivio.

La boswelia, o Boswelia serrata, también conocida como incienso indio, se ha utilizado tradicionalmente en la medicina ayurvédica para una variedad de problemas de salud, como el dolor artrítico o las afecciones de la piel.

La boswelia es un árbol que se encuentra en India, África y Arabia. La parte del árbol que parece tener el mayor beneficio medicinal es la goma o la resina que se encuentra al retirar la corteza del árbol. Si bien la boswelia se ha utilizado tradicionalmente para el dolor asociado con muchas afecciones, como lesiones cerebrales traumáticas o incluso calambres en la menstruación, se ha estudiado principalmente por su capacidad para controlar el dolor asociado con la artritis y la colitis ulcerosa.[8]

Parece que la resina de goma de la boswelia tiene efectos antiinflamatorios y analgésicos, y que incluso puede ralentizar la descomposición del cartílago que provoca dolor de artritis en primer lugar.[9]

¡Bueno, ahí lo tienes! Cinco plantas que pueden ayudarte con el control del dolor, aparte del cannabis. Al igual que con cualquier medicamento, botánico o no, puede haber ciertos riesgos asociados con la ingesta de medicamentos botánicos para el control del dolor. Puede haber efectos secundarios, reacciones alérgicas o interacciones con otros medicamentos que estés tomando. Y, como se mencionó anteriormente, también existe el riesgo de no abordar un problema más profundo que puede estar causando tu dolor. Siempre es mejor trabajar con un profesional de la salud que comprenda estos riesgos y pueda trabajar contigo para que uses estas hierbas / productos botánicos de forma segura.