¿Perdiendo tu imagen? Siete razones comunes de la caída del cabello

Introducción

A menudo expresamos quiénes somos y cómo nos sentimos a través de nuestro cabello. Independientemente de si tenemos el cabello rizado, liso, trenzado o en rastas, es un signo universal de belleza, sensualidad, fertilidad y atractivo. Además, el cabello nos ayuda a comunicar nuestro estado de salud. También cumple la función de proteger nuestras cabezas y nuestra piel, agregando no solo una capa de aislamiento, sino también más dimensión a nuestras personalidades. Bioquímicamente, es un reflejo del estado de nuestro mundo interno. Y desde el punto de vista social, puede ayudar a definir nuestra singularidad en el mundo. No es de extrañar que la industria del cabello obtenga millones, si no es que miles de millones en ingresos cada año. En todas las culturas del mundo se han llevado a cabo rituales capilares y tal vez sea la parte donde una persona se enfoca más con relación a su autoestima, la confianza en sí mismo y la belleza. La forma en que nuestro cabello afecta nuestro estado de ánimo incluso se expresa en frases que comúnmente utilizamos: "¡Hoy mi cabello está teniendo un mal día!" O "Me encanta cómo se ve/se siente mi cabello". Por lo tanto, no es difícil imaginar por qué una persona puede preocuparse o incluso angustiarse cuando su principal rasgo de atractivo comienza a caerse.

El cabello se compone principalmente de una proteína llamada queratina y crece desde justo debajo de la superficie de la piel a partir de un folículo. El folículo es el área donde los vasos sanguíneos transportan los nutrientes necesarios al cabello para que crezca. El cabello continúa creciendo hacia afuera desde la piel como el eje, que en realidad se considera "muerto". Una vez que el cabello ya no recibe la nutrición que necesita para crecer, se cae o se desprende.

Como con cualquier cosa en la naturaleza, existe un ciclo de crecimiento, estasis, muerte y regeneración; esto ocurre de igual forma para el cabello. Las cuatro etapas principales del ciclo del cabello son: anágeno (caracterizado por un crecimiento y proliferación rápidos), catágeno (un período de apoptosis celular), telógeno (un período de descanso) y exógeno (caída de cabello desde la raíz) ⁽⁹⁾. El cabello puede estar en cualquiera de las tres primeras fases al mismo tiempo. En un año, el cabello crece un promedio de seis pulgadas, pero se pueden caer un promedio de 50-100 hebras al día, lo que se considera normal. Cuando la caída de cabello difiere de estos patrones, puede ser alarmante. Por lo tanto, es importante dilucidar por qué se está cayendo el cabello para enfocar mejor las opciones de tratamiento. Las razones de la caída de cabello son muchas, pero las categorías principales incluyen deficiencias nutricionales, desequilibrios hormonales, enfermedades autoinmunes, genética e infección. Este artículo se centrará en algunas de las razones más comunes de la caída de cabello.

En una publicación de la revista científica American Family Physician, se mencionó que la prevalencia de anemia por deficiencia de hierro en mujeres es más alta que en hombres (2%), y que las mujeres mexicanas y afroamericanas tienen una mayor prevalencia (20% frente a 12% en mujeres caucásicas). ⁽³⁾. El hierro es parte de la hemoglobina y juega un papel importante en la oxigenación de nuestros cuerpos en general. Además, es necesario para que nuestras células produzcan energía y para que la tiroides produzca sus hormonas ⁽⁴⁾. El hierro está disponible para el cuerpo en dos formas: hierro hemo (carne) y no-hemo (vegetales y algunos suplementos). La deficiencia y, finalmente, la anemia se produce cuando no se toma hierro en cantidades suficientes; cuando hay un problema con la absorción o más comúnmente; cuando hay una pérdida de sangre. Las mujeres que menstrúan tienen la tendencia a tener deficiencia de hierro y anemia cuando tienen menstruaciones uterinas abundantes y dolorosas. Con el tiempo, muchas también sufren de la caída de cabello, porque no llega la sangre suficiente al folículo para nutrirlo y promover el crecimiento. Específicamente, el cabello tenderá a adelgazarse y caerse. Si este es el motivo de la caída de cabello, entonces es apropiado hacer las evaluaciones necesarias para confirmar esta deficiencia y se deben hacer los cambios adecuados para solucionar el problema.

Sabemos que el cabello se compone principalmente de una proteína que agrega sustancia y volumen o cuerpo a las hebras de cabello. Es el concepto detrás de los efectos de "voluminización y fortalecimiento" que muchos productos para el cuidado del cabello prometen. La proteína en sí está compuesta de aminoácidos que se pueden producir en el cuerpo u obtener de la dieta. En el cuerpo, la proteína juega un rol importante en el sistema inmune, y es el componente básico para las enzimas, las fibras musculares, las moléculas reguladoras y nuestro cabello ⁽⁴⁾. En resumen, la proteína es una parte muy importante de nuestra función diaria. No es de extrañar, entonces, que cuando no consumimos suficiente proteína de origen vegetal y animal, nuestro organismo pueda sufrir una deficiencia. Es fácil imaginar que no solo se ve afectado el cabello, sino también una gran cantidad de otros sistemas. Las deficiencias de proteínas también pueden manifestarse en forma de fatiga persistente, cambios de humor, retraso en la recuperación de lesiones y debilidad en los músculos, a veces acompañada de desgaste muscular (7). La evaluación de la deficiencia de proteínas es importante, especialmente en algunos vegetarianos y veganos, ya que las fuentes animales tienen una mayor biodisponibilidad. Garantizar la variedad adecuada y la posible administración de suplementos puede beneficiar a quienes no comen carne y experimentan caída de cabello.

Las vitaminas son factores importantes en muchas reacciones en nuestros cuerpos. Regulan nuestro sistema inmune, ayudan en nuestra digestión y son necesarias para nuestra salud en general. La vitamina A es una vitamina soluble en grasa que se puede almacenar en el hígado y es importante para la visión ⁽⁴⁾. También es un gran antioxidante. El cuerpo también puede usar los alimentos que comemos para convertir el betacaroteno (que se encuentra en las zanahorias y otros alimentos de color amarillo anaranjado) para producir vitamina A, según sea necesario. La vitamina A también puede aumentar en el cuerpo por el uso de ciertos medicamentos, como los utilizadas para el acné común. Cuando las concentraciones de vitamina A son altas en el cuerpo, puede producirse la caída de cabello. La piel también puede volverse seca como un signo temprano y las uñas pueden volverse frágiles. Si la toxicidad es prolongada, pueden producirse enfermedades hepáticas, por lo que es mejor controlarla y actuar en consecuencia cuando se sospeche de esta causa.

Cuando la caída de cabello es de naturaleza más hormonal, entran en juego las condiciones comunes que afectan el sistema endocrino.

La caída de cabello es definitivamente multifactorial. Cuando la caída de cabello se acompaña de cambios en la piel, intolerancias a la temperatura, cambios de peso y cambios en las deposiciones, la tiroides podría ser el factor clave implicado ⁽⁴⁾. La glándula tiroides se encuentra en el área justo encima del esternón y es responsable de nuestro metabolismo, entre otras funciones. Recibe información de la hipófisis y el hipotálamo para producir la hormona tiroidea (T3 y T4), que luego ejerce múltiples funciones en el cuerpo. Cuando las hormonas tiroideas disminuyen, puede producirse una caída de cabello, porque la hormona tiroidea influye en el desarrollo del folículo piloso ⁽⁸⁾. Sin embargo, esta caída de cabello no solo le limita a la cabeza; las cejas y el vello corporal también pueden comenzar a debilitarse y caerse. Si se sospecha una disfunción tiroidea, es muy importante tratar el problema de la manera adecuada.

A veces, se puede experimentar la caída de cabello como resultado de la disfunción de otras hormonas. Cuando llegamos a la pubertad, las características sexuales secundarias, como el desarrollo de los senos y el crecimiento del vello de las axilas, entran en la ecuación y están influenciadas por la hormona estrógeno en las mujeres. En los hombres, la testosterona es la principal hormona que influye en los cambios de voz y la madurez sexual. El estrógeno y la testosterona son hormonas esteroides que influyen en los ovarios y los testículos y se encuentran en cantidades variables en ambos sexos. Durante el ciclo menstrual, una mujer produce un óvulo que luego puede ser fertilizado o desechado. Por razones desconocidas, algunas mujeres forman quistes múltiples en el ovario que da como resultado irregularidades menstruales, dificultad con la fertilidad, acné e hirsutismo ⁽⁴⁾. Los niveles elevados de testosterona y los niveles elevados de insulina impulsan este proceso y pueden asociarse con la caída de cabello ⁽¹⁾. El factor distintivo en este caso es que la caída de cabello se asemeja a la caída de cabello masculina (adelgazamiento del cabello en la corona con retroceso de la línea anterior del cabello) y se conoce como calvicie androgénica o de patrón masculino. Este es un problema complejo y hay muchos factores en juego, pero el objetivo principal en el tratamiento de este problema es manejar los niveles de insulina de manera adecuada.

Cuando una mujer envejece, sus niveles de estrógeno tienden a disminuir y la función ovárica comienza a disminuir. Para algunas mujeres, la disminución puede ocurrir más temprano o más tarde y también está sujeta a otros factores. Cuando no ha tenido un período en doce meses, la mujer hace la transición a la menopausia ⁽⁴⁾. En este punto, las mujeres pueden comenzar a experimentar caída de cabello. El patrón distintivo en este caso es el adelgazamiento del cabello en la corona que no afecta la línea anterior del cabello (caída de cabello del patrón femenino), a diferencia de lo que se ve en el SOP. ⁽⁶⁾ En algunos estudios en los que se inhibió la conversión de testosterona en estrógeno, se experimentó caída de cabello. Lo que se pudo concluir es que el estrógeno puede ser importante para estimular el crecimiento del cabello y, por lo tanto, su reducción en mujeres menopáusicas y posmenopáusicas puede estar relacionada con la caída simultánea de cabello. Se continúan realizando investigaciones en esta área para ayudar a arrojar más luz sobre por qué puede caerse el cabello en la menopausia.

La caída de cabello a veces puede ser de naturaleza autoinmune. Esto significa que el sistema inmune está afectado hasta el punto en que ya no se reconoce a sí mismo y, por lo tanto, se ataca a sí mismo. Específicamente, el sistema inmune comienza a atacar el folículo del cabello y, por lo tanto, causa la caída de cabello. Este patrón de caída de cabello puede afectar toda la cabeza (alopecia total) o todo el cuerpo (alopecia universal). ⁽⁵⁾ Por angustiante que esto pueda ser, desafortunadamente también es bastante común y sigue un curso impredecible. Las personas afectadas pueden experimentar recaídas múltiples a pesar de las múltiples opciones de tratamiento, por lo que la información y el asesoramiento sobre esta tendencia se vuelven muy importantes para su manejo y cuidado.

Además de estas razones comunes, todavía hay una variedad de otras razones por las que puede ocurrir la caída del cabello. Algunas consideraciones importantes incluyen: los hongos y otras infecciones, patrones hereditarios y mala manipulación del cabello (alopecia por tracción). En este punto, uno puede apreciar todas las complejidades que a veces están implicadas en una sola manifestación o condición, como la caída de cabello. Por lo tanto, cuando se experimenta la caída de cabello, es importante explorar la causa y tomar las medidas adecuadas para encontrar la solución correcta.